Reinventar una cultura nueva

Cuando yo era pequeño casi todo lo que necesitábamos saber se encontraba en los libros. Poco a poco o quizás muy deprisa nos hemos ido encontrando con otra forma de vida que nos obliga a tener opiniones sobre innumerables cosas nuevas y muy diversas: del fútbol al automovilismo, de la energía nuclear a los alimentos trangénicos, del futuro que nos espera al pasado que vivimos, de la sexualidad a los nuevos modelos de familia, de la educación de nuestros hijos a la educación de los hijos de los demás, de los asuntos políticos a los económicos, pasando por los religiosos, del aborto a la eutanasia, del sentido de la vida al sentido de la muerte, y podíamos seguir…
Demasiadas cosas nuevas, necesitamos una cultura nueva. Una cultura nueva que nos ayude a encontrar respuestas, a interiorizarlas y hacerlas nuestras. Nos encontramos con la obligación de reinventarlo casi todo. ¿Podremos?

Dioses amigos

Estamos en Semana Santa. Todo está lleno de religiosidad. Religiosidad sacra y laica. Quizás sea oportuno seguir a Fernando Savater en su invocación de dioses que se oponen entre si, dioses contradictorios y complementarios, dioses en los que no creo pero que imagino y reconozco, y en algunos casos necesito. Tales como:
el dios de la palabra oportuna;
el dios de los recuerdos;
el dios de tus manos;
el dios de tus labios;
el dios de los números, tan complejo;
el dios que me hace sonreir;
el dios de las montañas;
el dios con el que me cruzo en la calle;
el dios que nunca responde;
acompañadme, engañadme o desengañadme,
fatigoso desconcierto de la vida, igual que aquellos versos de Luis Cernuda:
No preguntes si vale
la pena haber venido,
sino déjate, piensa
que un dios es hoy tu amigo.

Demasiada inconsciencia

Me ha sorprendido el escaso eco que ha tenido la información de Paul Kenedy comentando el documento de Tim Barnett del Scripps Institution of Ocenagrophy de San Diego.

Este informe nos llama la atención sobre los ecosistemas que se estan desmoronando: plantas que cambian de color, aves marinas que mueren, deshielo de los glaciares andinos y del Himalaya.

Si a este documentado y serio informe le añadimos el aumento del precio del petroleo, la autorización por explotar el que hay en Alaska, algo por lo que el presidente Bush lleva luchando cuatro largos años.

El aumento de la población mundial, fundamentalmente en la India y en China, donde la primera pronto superará a la segunda, dentro de unos años India y China tendrán un tercio de la población mundial

La escasa presencia de Africa en el futuro.

Nuestro continuo derroche ante todas estas informaciones que da la sensación de no ir con nosotros.

Mirandolo por el lado optimista ¿estamos preparados para viajar a la Nueva Tierra?

El vacío moral

El rey Juan Carlos ha hablado de “imperativo moral” al luchar contra los terroristas. El presidente de la ONU reclama la necesidad de luchar contra los terroristas sin olvidar los derechos humanos. Los dirigentes y gobernantes usan con profusión el lenguaje de los valores humanos. Da la sensación de querer unificar los parlamentos con los púlpitos ahora que la religión católica parece estar volviendo a los viejos cuarteles integristas olvidando las ventanas abiertas para la entrada de aire fresco del Vaticano II.

El vacío moral no ha preocupado en absoluto a los intelectuales ni a los políticos en los últimos años, quizás a los educadores, Ha estado de moda un culto a la provocación, un cinismo pseudocientifico y pseudomodernista, un canto de libertinaje contra las flores del mal.

Pero el vacío sigue ahí. Sin llenarse. Y la historia no ha enseñado que estos vacíos suelen llenarse con la aparición de autoritarismos. Autoritarismos sociales, políticos y morales.

¿Estaremos caminando en esa dirección?

El futuro es inimaginable

El futuro requiere imaginación. Nos encontramos a problemas que nos preocupan enormemente: el cambio climático, la energía, nuevas enfermedades.
Hay una ciencia nueva que estudia soluciones: la nanotecnología.
Esta ciencia estudia el comportamiento de átomos y moléculas. Gracias aun microscopio que invento la empresa IBM se pueden observar. Los objetos que se ven en el se miden en nanometros (un pelo es igual a 80.000 nanometros)
Pero lo realmente importante es que a ese tamaño las leyes de la física común no funcionan, Tienen sus propias leyes. Esto nos permite usar telas resistentes a manchas y olores, etc. Y esto es solo el principio.
Confiemos en la imaginación.

Ofensas y ofensas

He visto en El País el anuncio de una marca de ropa que ha sido prohibido por los gobiernos italiano y francés por considerarlo ofensivo para los cristianos. En realidad sólo he visto la foto que acompaña este comentario y ante ella yo, que me considero cristiano no me siento ofendido. Es una representación artística que imita una magnifica pintura de Leonardo Da Vinci en la que se cambian los personajes masculinos por femeninos. Creo que ustedes estarán de acuerdo conmigo en que es incluso agradable y simpática de ver.

Está de moda usar simbología religiosa para demasiadas cosas y veo lógico que algunas personas sientan herida su sensibilidad.

Pero a los cristianos nos deben ofender otras cosas más serias e importantes, por ejemplo las injusticias que se cometen a diario con los pobres, con los enfermos, con los niños, con los emigrantes, con las mujeres, con los ancianos, y yo no veo manifestaciones pidiendo justicia, ni solicitando a los patronos que no falsifiquen nóminas y que paguen salarios más justos, ni prohibiciones gubernamentales a las diferencias de salarios, y esto si son OFENSAS a los cristianos.

¿Seguiremos permitiendo estas ofensas?
 

¡¡¡¡¡Nunca más!!!!!

Matar a alguien es algo terrible, le quitas todo lo que es y todo lo que puede llegar a ser. Frase contundente contra la gran cantidad de necedades pronunciadas en los últimos dias. Lo único claro que debemos tener es ponernos de acuerdo cuando hablamos de terrorismo y de victimas. Paremonos un momento y dejemos claro cual es nuestra posición.Por respeto a la verdad debemos ser tolerantes pero intransigentes.

Rebelión en la Iglesia Española

Aunque entraba dentro de lo posible nadie esperaba que los Obispos españoles nombrasen a un presidente que no fuera Rocco Varela.
Pero así ha sido, una rebelión silenciosa que ha dado un giro a la dirección de la C.E.E. que puede ser más importante de lo que parece a simple vista.
El nuevo presidente es un nacionalista moderado, que se muestra comprensivo con las aspiraciones nacionalistas, más partidario del dialogo a todas las bandas y que en las futuras negociaciones con el gobierno no tendrá el lastre de los enfrentamientos pasados y deberá tender puentes en busca del entendimiento.
En busca de ese futuro deberá potenciar la colegialidad de los obispos en contraposición al personalismo del anterior presidente Rouco Varela lo que es una buena noticia, huir del alineamiento con las posturas defendidas por el Partido Popular, y aprender a comunicar sus opiniones a los españoles con rapidez, agilidad, humildad y sin acritud.
Ojala este distanciamiento de etapas anteriores y parece ser que rompiendo con los deseos de Roma a los que siempre los obispos españoles han estado tan dóciles sea el inicio de una nueva etapa.

Yo no entiendo a la gente grande

Yo no entiendo a la gente grande...
Porque tapan la luz del Sol.
Porque han llenado el cielo de antenas y chimeneas.
Porque se creen importantes por el sólo hecho de ser grandes.
Porque me compran juguetes y no quieren que los use porque se rompen.
Porque se pegan entre ellos o pasan la vida discutiendo.
Porque siempre están diciendo que los demás estan equivocados.
Porque quieren empleos importantes y pasan la vida sentados en sillas.

¿Y tú? ¿Por qué no entiendes a la gente grande?